viernes, 10 de junio de 2011

A veces quisiera estar equivocado

En la entrada del 26 de mayo, conté sobre un incendio en una casa de lámina al pié de la carretera en Valle de Guadalupe. Supuse que había ocurrido algo malo con la gente que allí vivía. Mi prueba era haber visto los despojos de la casa debajo de cables de alta tensión.

En esta semana pasé varias veces por ahí. Vi que pusieron una cruz en el lugar. Esta vez no quise inventarme historias. Hoy me animé y bajé del carro para ver de cerca:


A veces quisiera estar equivocado...